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Concierto Gluck, #18

ganassi.jpgAyer por la tarde tuvo lugar el segundo Concierto Gluck con Sonia Ganassi y la Orquesta de la Academia del GTL bajo la dirección de Michele Mariotti. Una buena oportunidad de escuchar óperas de Gluck que no se programan habitualmente.

La verdad es que después de los comentarios leídos, entre ellos el de nuestro amigo Vianant, sobre el primer concierto entré poco predispuesta para el concierto. El aspecto de la sala tampoco es que fuera muy alentador ya que había muchas butacas vacías, especialmente en platea y anfiteatro; muchos abonados no consideraron este concierto muy atractativo.

El concierto se ha iniciado con la abertura de Alceste, interpretada de forma un tanto insulsa por la orquesta. Después la Ganassi ha interpretado dos escenas de esta ópera, en la versión original italiana de 1767. La primera escena me ha parecido un poco fría pero en la segunda la cosa ha mejorando.

El concierto ha seguido con la obertura de Iphigénie en Aulide y dos escenas de ésta. A partir de este momento he entrado de lleno en el concierto y me ha parecido que la Ganassi ha interpretado estupendamente ambas escenas.

La segunda parte se ha inicado con la obertura de Armide, dos escenas de ballets de la ópera, una escena de ésta y tres escenas de Iphigénie en Tauride que la Ganassi ha cantado estupendamente.

La verdad es que este tipo de conciertos no despierta grandes entusiasmos de público. La Ganassi ha sido muy aplaudida por el público pero sin levantar grandes pasiones, así y todo nos ha ofrecido una propina que no he sido capaz de identificar.

Parece ser que no habrá continuidad de esta cantante en las futuras temporadas del GTL. Una lástima después de los grandes momentos que hemos disfrutado con ella, especialmente con la Maria Stuarda en versión de concierto que suposo el debut de Flórez en el GTL.

Algunas personas han llegado tarde al concierto y han entrado en la sala cada vez que ha habido pequeñas interrupciones en el programa. La primera tanda ha entrado después de la primera obertura, lo cual puede ser admisible hasta cierto punto.

Lo que no me parece en absoluto inadmisible es que la segunda tanda de espectadores tardones haya entrado en la sala entre las dos primeras escenas interpretadas por la Ganassi y que además hayan sido acompañados por un acomodador a sus localidades de platea.

Parece que el concepto de pausa en un concierto en el GTL es bastante flexible, luego tenemos que oír por megafonía que hay ciertas cosas que no se pueden hacer por respeto a los artistas, ¿entrar en la sala iniciado el concierto y con la cantante y el director de orquesta en el escenario es respeto? ¿No funcionaban las pantallas del foyer que retransmiten el concierto por circuito cerrado?

Norma, #127

Hoy se representa la última función de Norma y con ella concluye la temporada 2006-2007 del GTL. Ayer, por lo tanto, vimos la penúltima función de la temporada y la verdad que fué una Norma espectacular, tanto la Norma de Fiorenza Cedolins como la Adalgisa de Sonia Ganassi nos ofrecieron una excelente función que recibió una gran ovación al final de ésta. El Pollione de Vicenzo La Scola no estuvo a la altura de los paeles femeninos. Andrea Papi estuvo bien como Oroveso y Begoña Alberdi estuvo muy bien como Clotilde.

Otra cosa fué la orquesta dirigida por el maestro Carella que sustituyó al previsto maestro Campanella. Bajo su batuta tuvimos que escuchar una de las peores oberturas de Norma a un ritmo exageradamente alto, del todo inadecuada para un teatro de ópera. Afortunamente estos tiempos acelerados se relajaron para volver a los cauces belcantistas y acompañar a la Cedolins de forma adecuada.

Muchos se preguntarán cómo es posible que la Cedolins pueda tener un gran éxito intrepretando este papel. La verdad es que su voz no tiene todos los graves ni las agilidades que requiere el papel pero todo esto lo compensa con un fraseo muy dramático, una gran presencia escénica y una interpretación muy personal, es su Norma y no se parece a otra. Todo ello convenció al público de forma únanime.

La Ganassi, con su Adalgisa, apoyó muy adecuadamente en los dúos a la Cedolins y cantó y fraseó con mucho gusto. Por todo ello podemos decir que la Norma que presenciamos ayer tuvo, al menos en sus intérpretes femeninas las dosis de italianidad y belcanto necesarios para que ésta se pueda convertir en un éxito para el público.

La Cedolins fue muy reclamada por el público del GTL y tuvo que salir a saludar repetidas veces. Ante la insistencia del público finalmente salió sola. La Cedolins quiso compartir el éxito con la Ganassi. Lástima que La Scola quisiera también compartir el éxito con ellas: recibió una sonora pitada que el público, magnánimo, no le había dado al principio.

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Después de la función, en el salón de los espejos, los liceístas del 4º y 5º pisos hicieron entrega a la Cedolins del premio como mejor intérprete de la temporada 2005-2006.

La Cedolins agradeció muy amablemente el premio diciendo que entre el público y el artista se produce una relación muy especial y que el artista refleja en escena el cariño que recibe del público.

Don Carlos, #68

Mucho se ha dicho y escrito sobre este título del GTL. Cuando la tarde del domingo me dirigía al teatro, pensaba si sería capaz de centrarme en el espectáculo sin tener en cuenta todo ese conocimiento previo. A veces lo malo es ir al estreno porque el montaje no está rodado, otras cuando va uno con una idea previa sobre lo que se va a ver.

Coincido, con la mayoría, en que Farina no es un tenor para hacer este papel por su tendencia al grito. Esto le quita todo el lirismo al Don Carlos de la versión de París. Y es que si el rol principal no consigue un éxito mayor que el resto del reparto es que la dirección artísitica del teatro no ha hecho un buen reparto.

Está bien querer estrenar cosas, pero lo recomendable sería que el reparto estuviera a la altura de las circunstancias. A la dirección artísitica no sólo le debemos pedir creatividad en la composición de la temporada, también hay que pedirle solvencia en lo musical, no sólo en lo escénico (ésta es la debilidad de esta dirección).

Los mayores triunfadores de la noche han sido la Ganassi, la Pieczonka, el (reforzado) coro y la orquesta. La Ganassi ha estado estupenda en la canción sarracena y en O Don fatal. La Pieczonka ha estado muy bien en Toi qui sus le néant des gradeurs de ce monde. En cuanto al elenco masculino no puedo destacar ni a Álvarez, que no estuvo muy fino, la verdad. Llegué a aburrirme en algunos momentos, cuando cantaban ellos.

En cuanto a la puesta en escena: los detractores del Sueño de Éboli abuchearon de lo lindo al final de la escena, todavía no entiendo el porqué, cualquiera diría que se estaba haciendo una apología de la República (o quizá era por eso). En cambio, en el auto de fe de la segunda parte, donde la parte musical pasa a un segundo plano y se prima la parte escénica, no se oyó chistar a nadie (quizá el aplauso a los monarcas de la obra lo salvó de la quema).

Lo mejor de todo fue el movimiento del coro en escena y cómo se aprovechan esas tres paredes blancas donde transcurre todo, sin que se eche nada en falta.

Anécdotas de la representación

Me tocó al lado uno de los detractores de El sueño de Éboli. Está claro que los que abuchean hacen más ruido que los que aplauden, yo creí que me había dejado sorda del oído derecho. Pero no fué así, durante la última parte de la representación pude escuchar perfectamente, con mi oído derecho, cómo sorbía el moco (otra cosa a añadir a las cosas desagradables que se pueden hacer en el GTL, aparte de toser y el ruidito de los envoltorios de los caramelitos). Y encima se mofaba de Farina cada vez que gritaba: sería que él no hacía ruido…